El tiempo no es
una esperanza
Es una amenaza

Jhonny Castrillón

viernes, 30 de octubre de 2009

PORQUE TAMBIEN TENEMOS NUESTROS MUERTOS POR RECORDAR

Manifiesto contra la vejez

Por Julián David Mira López q.p.d

Protesto contra la vejez y los achaques propios de la edad.
Reniego de las sillas de ruedas, del andar trabajoso y el olor a cementerio.
Me indigna el hecho de ver cómo el tiempo arruga la piel cual si fuera una
hoja de papel que hay que desechar porque en ella se ha escrito demasiado.
Me rebelo en contra de los bastones y los cuerpos encorvados que soló
tienen aliento para mirar el asfalto y buscar como locos la banca de un
parque cualquiera para sentarse a ver pasar en cámara lenta una película
que esta a punto de terminarse.
Me opongo a pasar los días atado a la cama de un hospital ante la imposi-
bilidad de respirar o debido a las putas molestias de la próstata.
Refuto tener que leer a través de un par de lentes bifocales las cartas de
amor que alegraron nuestros años maravillosos.
Pero sobre todo me niego a ver tu abundante cabellera cubierta de canas y
En tus ojos negros el reflejo implacable del tiempo.
Y no concibo que algún día no pueda tenerte a mi lado porque un pedazo
De tierra húmeda ha raptado tu hermosura.


DEl libro RAIZDECINCO. COMFENALCO. cOLOMBIA, 2000.

miércoles, 28 de octubre de 2009

CAMPO QUEMADO

CAMPO QUEMADO

Atrás el campo
paso de amarillo a gris
el sueño trunco
en árido cemento
Lleno de incertidumbre huyo
antes que lanzas
traspasen epidermis
camino por el sendero abrupto
del desamor
La muerte es un sueño físico
un ruido con eco sordo
vuelve realidad ¿cuál realidad?
La muerte es un sueño eterno

CAMPO QUEMADO

CAMPO QUEMADO

Atrás el campo
paso de amarillo a gris
el sueño trunco
en árido cemento
Lleno de incertidumbre huyo
antes que lanzas
traspasen epidermis
camino por el sendero abrupto
del desamor
La muerte es un sueño físico
un ruido con eco sordo
vuelve realidad ¿cuál realidad?
La muerte es un sueño eterno

Árbol de amor

Árbol de amor

El árbol bajo el cual aguardamos el bus se pudre
su corteza cae en troncos que se desastillan al golpear el cemento
pocas son ya las ramas con hojas en función

El dia menos esperado se desplomara
sobre la otra pareja de turno que aguarde el paso del bus

martes, 27 de octubre de 2009

jueves, 22 de octubre de 2009

Dolly Mejía Moreno 1920-1975




Adolescencia

Doce años se empinaban en la espiga de mi cuerpo.
dorados caracoles insinuaban la ruta de mis senos

Como un tallo de música giraba por la orilla del tiempo
columpiando en las cintas de mis venas prematuros ensueños

Leve curva de fruta rodeaba la forma de mi carne
ceñida simplemente con el olán tranquilo de mi traje.

Me gustaba cubrir con los muchachos sencillos de mi pueblo
por el musgo abstraído de la tarde hasta los altos cerros.

Era una niña dulce con un gajo de sol entre los dedos.
un surtidor de trigo perfumado por un cálido viento.

Inusitadamente y en silencio las venas se me ardieron
y el olán de me blusa perfilaba más agudos los senos.

Entonces en mi sangre cálidos campanarios resonaron.
Definitivo transito de espigas a trigo madurado.

Entonces comenzaron a teñirse de amor todos mis juegos.
Se me volvieron hombres de repente los muchachos del pueblo.






Dolly Mejía Moreno Jerico Antioquia Agosto 1920- Bogota Octubre 1975

poeta periodista

Las horas doradas Bogotá M. al Dia 1945 95
Raiz del llanto Bogotá Minerva 1948
Alborada en la sangre (poemas) Bogotá Minerva 1949 94
Manos atadas (poemas dramático) Bogotá Kelly 1951
Antologia poetica Bogotá Ed. Mundial 1956 331

miércoles, 21 de octubre de 2009